Materiales de embalaje en una comparativa de CO2
Más reciclaje, menos emisiones de CO2 y más sostenibilidad: para los consumidores y en la industria del embalaje, el tema de la ecología está más de actualidad que nunca. Aquí le contamos las ventajas de los materiales basados en fibras.
El ambicioso objetivo europeo de protección climática marca reducir las emisiones de gases de efecto invernadero entre un 80% y un 95 % para el año 2050. Sin embargo, el impulso hacia un consumo más sostenible no se da solo por la presión de los requisitos reglamentarios, sino también por una concienciación cada vez mayor. Como en el caso de los alimentos la protección de los productos es primordial, las propiedades de barrera de los envases de papel son cruciales.
Qué requieren los consumidores de los envases:
- Todo el embalaje que sea necesario, pero el menor posible
- Materias primas renovables en lugar de fósiles
- Envases biodegradables
- Una producción respetuosa con el medioambiente y unos flujos de transporte eficientes
Valoración del CO2 de los materiales de embalaje
Un estudio reciente destaca el papel que desempeñan los embalajes con base de fibra de celulosa en la reducción de las emisiones de CO2. Muestra cómo los materiales basados en fibras pueden mejorar el impacto ambiental de los envases de alimentos. En él se evaluaron diferentes tipos de embalaje gracias a una evaluación simplificada del ciclo de vida del ecodiseño (Life Cycle Assessment: LCA) para comparar cada solución de embalaje con su contraparte fósil. Los resultados muestran que los envases a base de fibra de celulosa tienen un menor impacto ambiental en comparación con los fabricados a partir de materias primas fósiles cuando se utiliza como referencia un peso del envase similar. De hecho, los valores de los envases basados en plástico están entre los 3 y los 5 kg CO2 eq/kg, mientras que los envases basados en fibras de celulosa están por debajo de los 1,5 kg CO2 eq/kg.
Por qué los clientes compran con criterios ecológicos y qué estipula la UE
Solo en Alemania se producen cada año cerca de 227,5 kg de residuos de envases per cápita, una cifra de las más altas de Europa. No obstante, la concienciación ambiental está creciendo: según una encuesta de Accenture, casi un 80% de los consumidores alemanes desea comprar en el futuro productos más respetuosos con el medioambiente, y algo menos de la mitad están incluso dispuestos a “rascarse el bolsillo” para hacerlo.
También la legislación se orienta a tener en cuenta el cambio climático: por ejemplo, a nivel europeo no dejan de adoptarse nuevos reglamentos y directivas que buscan reducir considerablemente la contaminación de los plásticos y aumentar la tasa de reciclado. Las medidas son múltiples: entre otras cosas, se emplean restricciones de mercado, objetivos de reducción del consumo y los reglamentos de diseño, recogida y etiquetado.
Establecimiento de una economía circular completa
Una gran ventaja de las fibras de madera es que el gas de efecto invernadero de CO2 absorbido previamente se mantiene ligado durante el procesamiento de las fibras para cartón y embalajes, así como durante la reutilización del material después del reciclaje. Y como la reducción de las emisiones de CO2 no solo depende del material utilizado, sino de todo su ciclo de vida, el objetivo es establecer una economía circular completa. La idea central de la economía circular es utilizar las materias primas empleadas durante más tiempo y con mayor frecuencia mediante el reciclaje, la reutilización y el reprocesamiento. En este sentido, vamos ya en la buena dirección: la tasa de reciclaje de papel es ya hoy en día muy alta: en los 28 países de la UE, asciende al 85,8 % para los residuos de envases de papel y cajas plegables.
La función de barrera es importante para los alimentos
Por lo tanto, una recomendación sostenible para los fabricantes debe ser hacer que el embalaje ecológico forme parte del mensaje de la marca y vincularlo al producto en términos de contenido. Además de factores como el diseño, el peso, el consumo de recursos durante la producción, la eliminación y el transporte, las funciones de protección del embalaje son muy importantes. Los productos alimentarios requieren unas funciones de barrera específicas que también deben cumplir los envases a base de celulosa.
Sappi pone en el centro la innovación y la sostenibilidad
También Sappi lleva años invirtiendo en el desarrollo de papeles funcionales con barrera frente al vapor de agua, el oxígeno, la grasa y el aceite mineral con unas excelentes propiedades de sellado térmico. Ya se ha avanzado mucho hasta ahora. Muchos fabricantes de marca ya utilizan papeles de barrera reciclables para sus embalajes. Pero Sappi tiene un gran objetivo a largo plazo: ofrecer materiales 100 % renovables y una alta barrera, incluso en las condiciones más difíciles. Además, hemos alineado nuestras prioridades de sostenibilidad con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas. Después de un análisis cuidadoso en todo el Grupo Sappi, actualmente nos estamos centrando en siete de un total de 17 objetivos, y nos concentraremos especialmente en lograrlos.